sábado, 26 de enero de 2013

Alguien con el que sentir mil sensaciones y tener el gusto de saber que quedan mil y unas más. Ese mismo alguien, quien comenzó con un típico tonteo y hoy en día tiene en sus manos mi corazón.
Ese alguien, sí ese…Tú! ¿Qué te quiero? Es algo evidente e indiscutible. Tan real como que la semana tiene siete días, y el día veinticuatro horas. Pero a pesar de ello, yo te quiero a mi manera; de lunes a domingo, las veinticinco o más horas que duran mis días, del uno al treinta-treinta y uno del mes. Tanto si duermo, sueño o estoy despierta. Si hoy, mañana o pasado es un día feo o bonito. Más, si no te tengo cerca, pues es cuando más te extraño. ¿Sabes? Siempre habrá opciones y motivos para quererte más, pero nunca habrá tan sólo uno para lo contrario.
Es así, cuesta describirlo, sólo tienes que mirarme cariño, mírame pues sabrás que no te miento, pues desde que comenzó esta historia ya no hay nada sin ti, ya no hay nada que me importe más. Mí vida comienza en tu sonrisa y termina en tu locura. Dicen que a lo bueno, una se acostumbra pronto y que razón oye, yo me acostumbre a ti con el primer día que pase a tu lado, con las primeras miradas, con las primeras sensaciones y esas mariposas en el estomago, con los primeros roce de piel y como no, cuando sin decidirlo supe sin más, que estaba enamorada de ti.
¿Qué, qué es de mi futuro? Pues no sé, ni idea…De lo que estoy segura es que quiero que estés en él, formes parte de él y que un día decidas no irte jamás de ahí, de mi lado, de mi mundo, de mi vida…
Te quiero - le dijo ella mientras una lágrima le resbalaba por la mejilla- pero no puedo seguir así...
- ¿Por qué? Es nuestro juego, así nos divertimos y nadie lo pasa mal - dijo él con tono despreocupado y su media sonrisa, la misma pícara de siempre.
- Ese es el problema, para mí dejó de serlo hace tiempo... - dijo con un tono apagado.
- No lo entiendo chica, explícate - le recriminó él.
- Todo comenzó como un juego, no sentíamos nada, pero ahora cuando te miro me entristece saber que ante tus ojos soy sólo un entretenimiento más, cuando me besas o me abrazas no logro olvidar que no lo haces con el amor que lo hago yo - dijo con frustración.
- Pero...
- No me interrumpas, déjame terminar. Llevo meses intentando que te des cuenta de esto, de que estoy aquí, pero es inútil, porque no eres capaz de ver más allá de tus narices. No, no quiero seguir con este juego porque me estoy haciendo daño pensando que algo podría ser y por muy bien que halla jugado he perdido esta partida, no puedo engañarme más, adiós... - dijo con rabia y dolor- GAME OVER
Y cuando crees que todo es perfecto, cuando ves que las cosas salen bien, viene el viento en contra, que digo viento, un huracán, que va destrozando a su paso todo en lo que creías, un huracán que destroza todos tus deseos que que derriba tus barreras, que pisotea tus escudos y arrastra tus espadas con el, todo lo que creías seguro, todo lo que creías perfecto, que jamás se estropearía, todo se va, se esfuma, como la arena entre tus manos, la arena de una playa a solas un sábado por la noche, en el que la luna se cola entre las nubes, intentando inutilmente iluminar todo lo que ves, o en este caso, lo que no ves, porque ese huracán también te ha cegado, ha borrado todos tus esquemas, tus planes, ha eliminado todo a su paso. Y ya no queda nada, nada a lo que agarrarse, nada de lo que algún día soñaste. Entonces, solo entonces, te das cuenta de que estás sola, de que en este mundo, nacemos solos y morimos solos, de que todo está de paso, de que nada es para siempre, te das cuenta, de que la vída es muy puta, pero sigues y seguirás sin cojones de follartela.
Antes de que digas nada y rechaces todo esto de pleno. Dime al menos dónde puedo encargar a alguien como tú, igualito a ti, aunque sea una copia barata, lo daré por válido. Pero encárgate de que venga con todos tus defectos incluídos en el precio. Pídeles que me plagien tu esencia, y tu estúpida manera de reírte de mí. Que hagan una absoluta fotocopia de la forma que intentas ignorarme, y hacer con que me buscas a metro por encima de mi cabeza. Lo quiero igual de artista, con la misma iniciativa, no me importa pagar gastos adicionales. Diles que no escatimen en tus detalles, y que le jodan al copyright pero quiero calcadas todas tus palabras. Que no le cambien tu ideología, que siga sabiendo lo que quiere y hasta qué punto. Que le falten horas a sus días y que venga a robármelas a mí, aunque sea de madrugada. Pídeles que encuentren la fórmula que tienes para que me sea imposible pensar que hay algo más allá de ti y nuestra circunstancia. Aprovecha la oferta y exige que me lo envíen sin gastos de envío, con solo ganas de mí. Y si no es posible eso, pide al menos la garantía y asegura mi corazón a todo riesgo, porque últimamente está hecho mierda y no quiere ver a nadie que no seas tú.

sábado, 19 de enero de 2013

-¿Pero todavía lo quieres?
+¿Todavía, dices? Pues claro. Cuando dije que lo quería, lo dije de verdad, yo no digo ' te quiero ' así porque sí, y cuando quieres a alguien no lo olvidas en un par de días, ni en un par de meses, y muchísimo menos lo dejas de querer. Al menos yo no, y me entenderá cualquiera que se haya aferrado a un recuerdo como a un clavo ardiendo, cualquiera que le haya puesto la misma cara a una canción durante meses y meses, que haya pasado alguna que otra noche en vela, que haya mirado las fotos de esa persona y se haya puesto a sonreír. Me entenderá cualquiera que se haya enamorado, cualquiera que haya querido a alguien de verdad, de manera incondicional y sincera.